
“Una persona que nunca se ha equivocado es porque nunca ha probado nada nuevo”
Albert Eistein

Cualquier tipo de organización tiene unas metas, unos objetivos que explican y justifican su existencia. La empresa, como sistema y organización productiva, también debe definir y tener claros sus objetivos.
Hasta este momento, hemos dedicado mucho tiempo a definir la idea de tu negocio simulado, a partir de ahora ha llegado el momento de dedicarnos a desarrollarla. Pero para poder hacerlo, la pregunta obvia es ¿qué pretendes con esta idea?, ¿cuáles son tus objetivos?, ¿y los de la empresa? Formular objetivos vagos, generales y ambiguos no nos sirve de nada (y además no nos ayudarán en absoluto para las siguientes fases). Para concretar los objetivos vamos a utilizar la técnica SMART.
