«La inspiración existe, pero tiene que encontrarte trabajando»
Pablo Picasso
La EMPATÍA es la capacidad que tiene una persona de percibir los sentimientos, pensamientos y emociones de los demás. Observar lo que hace la gente en su ambiente y ponernos en su lugar nos proporciona pistas sobre qué piensan o sienten. Nos ayuda a darnos cuenta de qué es lo que realmente necesitan y qué problemas son verdaderamente relevantes.
Durante el desarrollo del Proyecto de Simulación Empresarial seremos empáticos/as constantemente, será una actitud recurrente a lo largo de todo el curso. Y así:
✔️ Utilizaremos la empatía para generar nuestra idea de negocio. Antes de ponernos como «loc@s» y sin control a coger la primera idea de negocio que se nos pase por la cabeza, vamos a detenernos con calma y a hacer un esfuerzo para pensar sobre las necesidades, problemas… que pueden tener nuestros futuros clientes (aquellas personas que van a hacer uso en algún momento de un producto o servicio relacionado con nuestro sector profesional). Lo vamos a hacer ahora de un modo general. Fíjate, con esto podemos conseguir:
- Poniéndonos en la piel de los demás, podemos detectar muchas necesidades, problemas, etc. y darnos cuenta que tenemos una solución que proponer: ¡tendremos una idea inicial de un negocio!
- Nos ayudará a perfilar, desde un principio y que se concretará después, a qué clientes queremos (o debemos) dirigir nuestra empresa.
La importancia de conocer bien al cliente desde el minuto 1 te lo cuenta Cristina Armuña con dos ejemplos:
¿Cómo hacer un primer acercamiento al cliente? ¿Cómo podemos empatizar con él o ella? ¿Cómo generar una idea de negocio? ¿Cómo perfilar nuestro cliente «tipo«? Pues todo esto (y mucho más) puede trabajarse con la famosa herramienta del MAPA DE EMPATÍA.
✔️ Más adelante, en unas semanas, cuando tengamos ya cerrada nuestra idea de negocio, volveremos sobre nuestro mapa de empatía (con otras propuestas relacionadas que giran sobre el análisis de nuestro cliente) y concretaremos aún más este mapa. Diseñaremos un perfil específico y más pormenorizado de nuestro potencial cliente (y absolutamente ajustado a nuestra idea de negocio). Conforme vayamos avanzando en el proceso, te darás cuenta que esta parte «te lo pedirá» el PSE por sí solo (incluso varias veces) hasta tenerlo absolutamente claro y cerrado. Recuerda que este tu proyecto tiene vida y está en constante evolución. Sobre la importancia de ser continuamente empáticos te habla Alberto Arenal en este vídeo en el que no se corta «ni un pelo» 😅:
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